
Una de
ellas, los zaragozanos Misanthropy, fue para mi la segunda sorpresa de la
noche. Por supuesto antes de acudir al concierto, investigué un poco y escuché
los dos temas que tienen publicados en su Facebook y You Tube (no hay más
material porque la banda se encuentra en plena campaña de crowdfunding para
editar su primer EP). Y os aseguro que no estaba para nada preparada para lo
que iba a ver y escuchar. Y a vosotros no os queda otra que fiaros de mi
palabra cuando os diga que vale la pena rascarse los bolsillos y poner algo de
calderilla para que esta gente consiga su objetivo cuando antes. (Más info: http://www.siamm.es/es/proyectos/id/21/id_proyecto/112)
Pero volvamos al bolo. Misanthropy tocan thrash-black metal, sus temas tienen
garra, mucho potencial e interesantes cambios de ritmo que hacen que no te
aburres nunca. Empezaron con Merciless Vengeance y lo primero de lo que me di
cuenta fue que la voz de Daniela suena muchísimo mejor en directo que en las
grabaciones que escuché. No llegan a ser los típicos guturales, pero tiene un
desgarrado muy original (poco más de tablas y tendremos nuestra Angela Gossow
maña ;-). Así que empecé a disfrutar desde los primeros segundos. Al lado tuve
a Phil de los Soldier muy atento a lo que pasaba en el escenario y marcándose
un discreto bailoteo de vez en cuando. Los otros miembros de la banda también
se dejaron ver entre el público. Los Misanthropy se divierten en el escenario y
lo dan absolutamente todo. Hasta tal punto de que Christian reventó una cuerda
de su guitarra en cuestión de minutos y tuvo que coger otra (“La más fea”, como
me decía después de la actuación. Pero me da que podría tocar hasta la
mandolina y se hubiera divertido igual). Hay que reconocer que las guitarras de
Misanthropy suenan muy potentes, con unos acordes a veces muy pesados, tan
típicos de black metal y a veces más ligeros, pero siempre con muy buena técnica. Han
dado un buen ejemplo de ello marcándose la brutal Killing Peace de Onslaught con
una facilidad como si esta fuera una cancioncilla de parvulario, ¡olé vuestros
ovarios y cojones, queridos Misanthropy! No faltó el “intercambio de
brazo” entre Diego y Christian, marcándose
mutuamente los acordes, todo un espectáculo. También me han llamado la atención
la técnica y velocidad de Diego, el bajista (casi no podía apartar la vista de
sus dedos, impresionante) y la tremenda facilidad con la que Juan marca el
ritmo vertiginoso en la batería, parece totalmente relajado, brutal, señores,
muy brutal lo suyo… En fin. No os voy a nombrar todos los temas que tocaron,
porque como ya he dicho, de momento no hay manera de escucharlos por ahí. Si os
apetece una pequeña muestra, buscad Deadly Cold o Praise The Madness, los dos temas que terminaban el
setlist de Misanthropy. Pero no les dejamos irse sin un bis y para nuestra
sorpresa total, tocaron Night Crawler de Judas Priest, llevado totalmente a su
terreno, una propuesta muy interesante y que sonó muy bien. Una banda totalmente
recomendable, no os perdáis sus bolos, queridos amigos ¡no os vais a
arrepentir!
Unos
minutos para los cambios en el escenario y… Llególograndeseñoresyseñorasaversimicuelloloaguantamadremíaloqueestápasandoaquí
(no, no se nos fastidió el editor de texto ni se me pegaron las palabras al
escribir, es que intento trasmitir la brutal potencia y velocidad de los
Soldier. ¡El cambio que se produce en estos chicos tranquilos, con sus gafas y
coletas, al empuñar sus armas en forma de instrumentos, es indescriptible! Saltaron
al escenario con una energía aplastante y parecía que llevan tocando desde hace
un buen rato porque en cuestión de segundos nos metieron de lleno en los suyo
con el potente Warbourne. Es absolutamente magnético lo de esta gente, un
thrash directo a la yugular y que te absorbe y posee con cuerpo y alma. Viendo
la cinta de la guitarra de Phil, la típica amarilla “Police line, do not
cross”, pensé que no hay quien tenga cojones de cruzar esta barrera de brutal
sonido. Y quizás no fui la única en pensarlo, porque esta vez no hubo pogos ni
mosh pits y el público, aunque visiblemente encantado, estaba más bien
quietecillo a pesar de los intentos de Phil que en un momento dado bajó del
escenario liándose a empujones con la peña. En fin… Es que acojonáis, queridos
Soldier ;-) Después de Corrupted (Sex In Prison) con sus cambios de ritmo, sin
parar pasamos a The Great Western Oligarchy y si no me equivoco, aquí llego el
momento de parar un segundo por primera vez. Phil dedicó unas palabras al
público, mientras los demás miembros de la banda empezaron la primera de sus
particulares “duchas” sirviéndose de las botellas de agua. Es que la vida de un
asturiano en Zaragoza durante el verano es muy dura, amigos (y eso que este día
no hacía demasiada calor) y más debajo de los potentes focos. Pero nada, aquí
nadie para por más de unos segundos, a machacarse los cuellos con Christoholic
y sí, querido jefe, tal como sospechabas en tu reseña ¡es una locura en
directo! Las guitarras echando humo y el loco de Daniel corriendo por el
escenario y fuera de él, llevando un rastro de agua debajo de los pies y el
cable de la guitarra detrás, asustando al público por si se cae y al técnico
(corriendo detrás de él, jajaja) por si
lo barre todo con el cable. Vamos ¡una locura en toda regla! Seguimos con Kill
My Soul sin bajar la velocidad y seguidamente llegan otros segundos de calma
mientras Phil nos explica que se puso de
moda hacer temas sobre los villanos y cada banda que se precie hade tener uno,
así que ellos no piensan quedarse atrás. Y anuncia un temazo dedicado a un
villano absoluto e indudable, José Ignacio Wert: Genital Wert por supuesto.,
con la letra que todos deberíamos aprender de memoria. Seguimos con Holy Wars, Theory Of Nothing, Stand Your
Ground y con la banda entregadísima y sin parar de quejarse del calor,
pobrecicos. “Somos asturianos, esto es un infierno, tenemos los huevos
encharcados”, nos decía entre las risas Phil durante otro breve descanso.
También hubo otro toque de humor, creo que fue durante Between Two Masters o
Destroyers cuando el crack de Christian de Misanthropy (que por supuesto se
encontraban entre el público) invito al bajista de Soldier a dar un mordisco a
un bocata que estaba comiendo, provocando con ello más carcajadas. Siguiente
tema, Axis Of Evil no dejó ningún cuello sin dolor y de propina Revolt y
Cowboys From Hell terminaban el gran concierto que se marcaron los Soldier.
Como últimamente es habitual en Zaragoza y a pesar de
enormes esfuerzos invertidos en la promocióny difusión del concierto, lo único
malo este viernes en la Sala King Kong fue la baja asistencia de público. Yo ya casi
prefiero no comentar mucho, pero cada vez estoy más harta de escuchar quejas de
que no hay relevo en el metal, que no hay conciertos buenos, que no sé qué más…
Un consejo, queridos amigos: si de vez en cuando levantéis los culetes de las
sillas, soltáis las birras (que os cuestan bastante más que una entrada al
concierto) y dais cuatro pasos, os vais a encontrar con montones de conciertos
buenos y baratos. Y comprobáis por vosotros mismos que sí hay relevo, pero por
desgracia acude a verlo su puta madre… Sólo hace falta dejar de buscar excusas,
queridos y se abrirá delante de voz otros un mundo de luz y color, esto, quiero
decir: un mundo negro como la noche más oscura y lleno de buen METAL.
Para
terminar, mil gracias a los Soldier, a su manager Iñaki Fernandez de Pablo y a
Factory Rock Prods. por habernos invitado a este pedazo de concierto y por
regalarnos el disco para sortearlo entre nuestros lectores. Y una vez más para el técnico de
sonido y todo el equipo de la Sala King Kong por su profesionalidad y simpatía.
¡Un abrazo enorme, amigos!
lml
ResponderEliminarMISANTHROPY!!!!
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