
La banda está formada, actualmente, por Ivan Lozano y Miguel Angel Capilla (miembros originales) en las guitarras, Alvaro "varu" Gonzalez (Noctem, Motörized) al bajo, Joan Chilet (Toxia, Gigatron) a la bateria y Rafa Villalba (Allegory, Hits) a la voz, así que, como podéis ver, lo de que tienen influencias de todo tipo no es un farol, meter un músico de Gigatron y uno de Noctem en un mismo disco tiene que dar pie a combinación explosiva. El disco ha sido grabado en los estudios Fireworks con Quique Mompó y Fernando Asensi y en Mojave con Manuel Tomás, que también lo ha producido y mezclado. La masterización la llevó a cabo Mika Jussila en Finnvox.
The Farm abre con la intro, que lleva el mismo título que el disco, y da paso a Some Things Never Change, cañera y técnica desde el riff inicial, alternando con todo tipo de ritmos durante sus casi seis minutos. Muy interesante el pasaje instrumental que ocupa los últimos minutos del tema. Más agresiva se presenta la siguiente, Numbers, donde aparece el registro gutural de Rafa, otorgando un aire muy oscuro a una composición en la que manda el Metal Extremo. Bleeding, el single elegido para sacar videoclip, protagonizado por la vertiente melódica de la banda, pero sin perder contundencia y me llama la atención ese brusco cambio que da paso al solo de guitarra, momento en que se me vienen a la cabeza géneros que no pertenecen al Metal durante los segundos que tardan el resto de instrumentos en acompañar a la guitarra solista. Ese momento supone otra buena muestra de versatilidad por parte de The Sweet Metal Band, que no se cierran a nada. Addicted To Failure, un muro de unos dos minutos de caña burra con tintes thrashers, nos lleva al dúo final del disco, que llega con The Beginning of the End, uno de los mejores temas del disco para un servidor, con un interesante juego de riffs destinados a hacerte mover el cuello, y One More Nightmare, que tiene un poco de todo y resume las diferentes capacidades de la banda en una especie de traca final.
Y eso, amigos, veteranía, ambición y versatilidad como carta de presentación de The Sweet Metal Band. Tiene mérito meter tantas variaciones en un disco y que aún así suene compacto, pues lo normal sería que acabase pareciendo un collage de trozos de canciones... pero, por suerte, no es el caso. The Farm contiene seis consistentes temas, jugando con la agresividad del Groove y géneros más extremos aún con la melodía del Heavy o el Hard Rock y destacando esas variaciones como principal activo de la banda. Buen trabajo.
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