Crónica: Resurrection Fest II (viernes 17)

El primer día del Resu fue algo light, como para ir calentando y eso... pero el segundo, amigo el segundo día...
Sin rodeos, va. Que este va para largo. Entramos en el recinto a las tres en punto para ver a Dagoba, que tuvieron ciertos problemillas técnicos y por ello empezaron diez minutos más tarde de lo previsto. Lo justo para que nosotros pudiéramos verlos empezar (no era necesario, chicos :'). Pero problemas aparte, los franceses dieron un concierto bestial, de unos 25 minutitos solamente. Se hizo cortísimo de cojones. Dieron lo que viene siendo una lección de headbanging con su aplastante groove metal, presentando algunos temas de su reciente album (discazo del carallo) y también algún pelotazo clásico como The Man You're Not para dejar el listón altísimo desde las tres y veinte de la tarde.

Ratejo de descanso (renunciando a unos Iron Reagan que me interesaban) hasta las 17:30, cuando aparecían los suecos Dr Living Dead. Yo ya no soy muy fan de las máscaras, claro que si sirven para cuajarte un personaje aún me parece bien, pero en su caso no lo entiendo. Le quita mucho feeling a la actuación no poder ver sus caras... pero vale, era un apunte que quería hacer. Salieron a darlo todo pese a que su vocalista llevaba la pierna escayolada (según dijo, le había disparado el puto Robocop) y eso le impidió moverse con soltura, pero hizo lo que pudo, lo hizo bien y admiro su esfuerzo. Buen concierto por lo general de los suecos, que están como un puto rebaño de cabras, y en el que tuvieron la colaboración de Guillermo Izquierdo (de Angelus Apatrida) en un tema. ¿Qué coño venía después? Ah, sí, Kadavar. No me acuerdo del orden, sí de los conciertos, no os asustéis... jejeje. Vale, los alemanes Kadavar eran los únicos representantes del stoner en el Resu tras la espantada de Mastodon antes de ser confirmados. No tenía yo muy claro si su rollete psicodélico iba a encajar en el Resu, pero lo hicieron muy guay. Cada uno en su posición y sin dar un puto paso, como esos perretes de los coches que solo mueven la cabeza, pero con algo más de huevos, no sé si me explico. Cabeceaban bastante mientras soltaban su virtuosismo con sus respectivos instrumentos, destacando la bestial labor del batería. Allá por la mitad se me hizo algo pesadete, pero supongo que es por no estar del todo familiarizado con su obra más allá de las míticas Black Sun, Doomsday Machine o Come Back Life. Estuvo bien el show de los de Berlin, aunque nada destacable.

En un no parar, cagando leches para el Chaos Stage, donde los Toxic Holocaust del gran Joel Grind iban a descargar su dosis de puro thrash metal, siendo una de las bandas más atractivas de dicho género en el cartel del Resu. Congregaron a una buena cantidad de gente frente al escenario pese a ser solo las 18:50. Temarracos como Awaken The Serpent, War Is Hell, Acid Fuzz o Nuke The Cross sonaron de lujo y nos dejaron el culo como un bebedero de patos. Antes de cenar me acerqué a ver unos minutos a Backyard Babies, que no me llamaron mucho la atención, poco más que un concierto entretenido... Tras la cena, a pillar sitio para el motivo por el cual estaba allí, amigos. Motörhead. Conseguí un buen sitio, pero cometí un error, Motörhead era una banda que quería ver bien, sin hostias, pogos ni demás, por lo que al segundo tema tuve que salir del meollo. No me importa darme de hostias con Heaven Shall Burn o Soulfly, pero a Lemmy quería verlo. Me situé en un lateral del escenario y de allí pude disfrutar del show de estas putas leyendas, pese a que Lemmy está hecho polvo y le costaba sacar adelante algunos temas, siendo Mickey Dee el encargado de mantener vivo el show con su nivelón a las baquetas. No pude evitar emocionarme cuando sonaron Ace of Spades y Overkill o cuando Lemmy nos apuntó con el bajo al final. Concierto más emotivo que espectacular por poder ver en persona a una grandísima leyenda del metal como Lemmy Kilmister. O lo que queda de él.

Emociones fuera, hay que correr al Chaos Stage, donde Nuclear Assault hicieron honor al nombre del escenario, armaron la de Dios, sonaron bestiales, y pude desquitarme en sus circle pits de lo que me había pasado con Motörhead. Están un poco cascados, pero joder como sonaron... Sin, Brainwashed, New Song, Betrayal, Trail of Tears... temazos clásicos de estos veteranos del thrash que nos dejaron en pelotas y medio muertos de cara al siguiente grupo, los fineses Children of Bodom. Lo de estos fue una lástima, el setlist cojonudo, Alexi estaba en uno de esos días en que sí le apetecía tocar (tiene días de crack y días apáticos de cojones)... pero les fallo el sonido. Un sonido muy bajo y en el que costaba escuchar al vocalista finés. Lo cual deslució una actuación que podría haber sido de las mejores del festival. Que lástima... aún así pude disfrutar algo de temazos como Are You Dead Yet, Hate Me, Needled 24/7 o In Your Face, que, joder, son putos temazos. Y pudimos asistir a un hecho histórico. ¡¡¡¡Alexi Laiho hablaba e interactuaba!!!! Eso sí que es un puto milagro y no los de fátima, colega. con sus "We're fucking Children of fucking Bodom from fucking Finalnd and Thank fucking you for fucking being here with fucking us" (Dramatización, lógicamente).

Para rematar un día largo, tocaba ver a In Flames, Tras sus últimos descalabros discográficos, esperaba con curiosidad y ganas su directo, a ver si ahí al menos conservaban algo de lo que en su día fueron. Y sí, estuvieron enormes. Uno de los mejores conciertos del festival, con una escenografía de nivel de cabezas de cartel, los suecos arrancaron por todo lo alto con el clásico Only For The Weak y ya nos ganaron. Tocaron  su setlist completo, 16 temas. Como era de esperar, todos de Clayman palante, claro. Bullet Ride sonó a Dios, Cloud Connected también, las del infumable Siren Charms sonaron bastante bien tambien (tocaban las dos más potables), y quitando The Chosen Pessimist que nos dejó muy fríos a todos (y eso a las 2 de la madrugada es un problemón), el resto sonó bastante bien y ellos dieron lo que tenían. Además, subieron a un chaval del público para cantar (jodidamente bien) Take This Life, en un momento que Javier, de buen seguro, nunca olvidará. Con My Sweet Shadow (tema que no entiendo por qué es el último que tocan) cerraron un gran show y nos fuimos al sobre mientras The Exploited sonaban bastante bien, por lo que parecía desde la distancia...

(Crónica del jueves)
Crónica del sábado

Comentarios

  1. Children Of Bodom y Motörhead son mis dos bandas favoritas de esta edición, me hubiese encantado estar allí.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario