Reseña: Cerosity - Ashes Of Faith.

Esta es una de las primeras reseñas en las que pensé cuando estaba dándole al botoncito de "crear blog", chavales, maldita sea. Hace unos añitos, no sé exactamente cuántos, cuando iba empezando a hacer más frecuente mi presencia en los cada vez más escasos bares metaleros de la ciudad de Palma (concretamente de la denostada plaza Gomila), vi muchos conciertos en esos mugrientos y sudorosos bares como el Fraguel y, aunque cada vez menos mugriento salvo por honradas excepciones, Tunnel. En esos tiempos y hasta el día de hoy he podido ver algunas bandas que pasaron frente mis ojos sin pena ni gloria y bandas que me han volado la puta cabeza y cuyo nombre se me quedó grabado a fuego entre ceja y ceja. En el segundo grupo, evidentemente, estaban Cerosity, que en una de aquellas noches dieron un pelotazo de Thrash/Death Metal a pura zapatilla y que me abrasó la piel como si de un puto huracán se tratara. Desde entonces apenas los he vuelto a ver, no se han prodigado mucho o yo no los he seguido lo que debería, pero reaparecieron hace poco en el Fraguel Rock, gran noticia, y en la primera edición del Extreme Division Mallorca, dejando claro que Cerosity no se habían ido, sino que estaban tomando carrerilla para volver con más fuerza y mala hostia que nunca.

Hoy, afortunadamente, tengo entre manos el segundo EP de la banda, formada en 2008 y que actualmente cuenta en sus filas con Alex Correa (guitarra líder), Evaristo Orihuela (guitarra), Edgar Bravo (voz), Pep Comas (batería) y Tino Johansson (bajo) tras algunas variaciones en sus miembros. Ashes Of Faith se presenta ante mis narices como un trabajo en el que Cerosity abandonan un poco la vertiente Thrash que acompañaba a su estilo, centrándose más en un crudo y contundente Death Metal, siguiendo el estilo europeo del género, marcado por grandes bandas como Asphyx o Dismember y un poquito de los americanos Morbid Angel. Los mallorquines basan su sonido en unas guitarras bien trabajadas, unas secciones rítmicas veloces y agresivas juntando con ello un sonido muy propio, pero sin perder aromas a Death Metal de la vieja escuela. El EP ha sido grabado en el Estudio VAIVE con Josep Nadal y la portada es obra del venezolano John Quevedo Janssens.



Una vez nos metemos en faena encontramos una inquietante Intro que deja paso a Ashes Of Faith, el tema título, un abrasivo corte de Death Metal, capitaneado por un riff procedente del puto averno. El juego de guitarras y ritmos va marcando el tema, que atraviesa por varias fases entre veloces y contundentes, dejando un conjunto de gran nivel para ir abriendo. Seguimos avanzando con Death In Disguise, donde la máquina riffera vuelve a arrasar por dónde pasa, potente y directa, sin piedad, liderando otro gran corte. Bueno, ya llevamos dos temas, va bien, seguimos vivos, con varios huesos rotos y parte del careto desfigurado, pero vivos, aunque... ya se encargarán Prisoner Of Anger, abrasiva, contundente y cabrona como pocas, y The Rotten Age, de aires algo más oscuros y malévolos, de acabar de despedazarnos y mandarnos a la fábrica de comida para perros. 

Y es que, amigo, te gusta el Death Metal de corte clásico, me cago en Dios, Cerosity es tu banda. Aquí tenemos un EP de cuatro temas y una intro que, desgraciadamente, se hace cortísimo y te deja con ganas de más. Faltan dos o tres temas más para que estos mallorquines tengan tiempo de agarrarte, sodomizarte y meterte en el puto camión de la basura para que te lleve a dormir al vertedero. Pero, a falta de pan, bueno es un EP que nos demuestra que Cerosity están vivos y rodando, más cabreados que nunca y presentando cuatro auténticos temazos de la virgen santísima que espero poder ver y disfrutar pronto en directo. Si la única pega que le puedo poner es que se hace corto, significa que estos fenómenos han triunfado.

Comentarios